Así lo explicó, en diálogo con Radio Chubut, la secretaria general del Sindicato de Empleados y Obreros Municipales, Silvia Pato.

El pedido de los gremios es que se cierre el primer semestre con 35% de aumento, para lo cual solicitan que se incremente en al menos un 20% durante los meses de abril, mayo y junio; sumado al 15% que ya se había acordado para el primer trimestre.

Sin embargo el ejecutivo municipal se resiste y ofrece a cambio un 8% para mayo, pagadero el mes próximo, dejando la paritaria abierta, cosa que los gremios no aceptan porque quieren un aumento a más largo plazo.

Pato recordó que un ingresante en la municipalidad tiene un salario básico que no llega a los 54.000 pesos.

La gremialista aseguró que los empleados municipales que tienen unos 10 años de antigüedad ronda los 130.000 en todo concepto con lo cual un aumento como el propuesto por la municipalidad no llega a los 10.000 pesos.

A pesar de la diferencia y la evidente dificultad para hacer frente al aumento, Pato interpretó que no están dadas las condiciones para hacer medidas de fuerza porque los municipales no tienen un ánimo de lucha y en su mayoría cuentan con trabajos por la tarde justamente para mejorar los magros ingresos que perciben en el estado.