El empresario José Oroquieta, propietario junto con sus hermanos de la firma «La nueva Alicantina» que tiene como patrimonio campos en el departamento Gastre, denunció que la empresa Transpa que tiene el tendido eléctrico entre Futaleufú y Puerto Madryn, ingresó sin autorización a su propiedad, provocó destrozos en los alambrados, el suelo, la fauna y arrojó elementos dañinos para el medio ambiente.Oroquieta se refirió a la incursión de la maquinaria pesada en los establecimientos «La Alicantina» y «La Confianza» por donde pasa el tendido eléctrico sostenido por torres que se cayeron en el temporal de frío.
El empresario, visiblemente indignado, aseguró que sin ningún tipo de autorización los contratados por Transpa ingresaron al campo pisando y destruyendo el alambrado y realizaron la apertura de 3 rutas internas a lo largo de 8 kilómetros por 7 metros de ancho.
«Pisaron alambrados, reservorios fósiles, desparramaron basura, tiraron mangueras, hicieron un desastre» describió Oroquieta.
La indignación es que por ese accionar ponen en riesgo la condición de certificación orgánica de los campos que tanto les costó conseguir y sostener.
Es tal la impunidad con la que se movieron que ni siquiera cumplieron con la orden del ministerio de ambiente que los obligó a cesar en el proceder.
«Metieron una máquina con pala y oruga, una D7 que es de las más pesadas que se conozcan, en medio del campo para abrir caminos» se lamentó.
Todo esto quedó reflejado en un acta de la cual dio fe pública una escribana, a pesar de lo cual siguieron con el proceder.
Si eso lo hacen con los campos de su propiedad sabiendo que tiene recursos para exponerlo públicamente, se preguntó qué ocurrirá con los restantes campos por donde pasa el mismo tendido que, según se informó, cayeron entre 52 y 55 torres.