Eduardo Méndez, jefe de la Comuna Rural, en comunicación con Radio Chubut, explicó que la situación se debe a la insuficiente presión de agua que impide que llegue a los tanques de las viviendas.
Mencionó que durante el verano, el problema se agrava debido al aumento en la demanda de agua para riego y el uso de piletas.
Los residentes han comenzado a utilizar bombas para intentar mejorar el suministro, lo que ha generado tensiones entre los vecinos, ya que algunos se ven afectados por la disminución del caudal, indicó.
En ese sentido, Méndez señaló que no existe una reglamentación que impida el uso de bombas en la red de agua, lo que complica aún más la situación.
Para finalizar manifestó que la comuna está trabajando en soluciones a largo plazo, incluyendo la construcción de una cisterna para mejorar la distribución de agua en la localidad.