Lo informó, en diálogo con Radio Chubut, el presidente de ese colegio, Tulio Schadlich.
Todos los parques eólicos que se construyeron con monumentales torres donde se asientan los molinos que vemos en los alrededores de las ciudades, no fueron visadas por el colegio de ingenieros, por lo que «no puedo asegurar qué profesional hizo los planos y ejecutó la obra» dijo Schadlich.

El dirigente recordó que cualquier obra, y más esas de magnitud, deben pasar por el colegio de ingenieros que es el que certifica que los profesionales actuantes están en condiciones de llevar adelante la construcción.

Sin embargo, para el caso de los parques eólicos eso jamás se hizo y, según se informó extraoficialmente, las obras son ejecutadas por ingenieros de otros países cuya capacidad profesional nadie puede certificar.

En este punto pidió que sea el propio Estado el que controle porque ellos no tienen poder de policía, aunque ya advirtieron a las autoridades sobre la grave anomalía.

En la misma situación estarían las empresas petroleras y los que explotan canteras.

Y no dejó pasar de largo la aparición de profesionales «truchos», como uno que apareció en Comodoro Rivadavia haciéndose pasar por Agrimensor.

En su diálogo con Radio Chubut el presidente del colegio de ingenieros no ahorró críticas por la sanción de la ley que modificó y «desnaturalizó» el funcionamiento de esa organización.

Recordó que ellos impulsaron modificaciones, pero no las que se terminaron realizando, totalmente distintas y contraproducentes con la finalidad última de hacer los visados pertinentes en el menor tiempo posible y con el costo más bajo.

Tulio Schadlich aseguró que las modificaciones que se hicieron en la cámara de diputados sin siquiera consultarlos establecen más integrantes del directorio y crean delegaciones que hacen aumentar el gasto operativo del Colegio de Ingenieros, lo cual encarece el costo final.

Adelantó que hoy ingresarán una nota dirigida al gobernador Mariano Arcioni para que derogue la ley.