Se trató de un hurto ya que el propietario del vehículo reconoció que había dejado las llaves puestas y el rodado se encontraba abierto, porque las cerraduras no funcionaban.
El vehículo, un Renault Clío cinco puertas, fue sustraído esta madrugada de la intersección de las calles Pellegrini e Inmigrantes, a las afueras de un bar de la zona.
El propietario reconoció que se encontraba tomando unos tragos con unos amigos, cuando al retirarse del lugar, se dio cuenta que el vehículo ya no estaba donde lo había dejado.
Así lo informó el jefe de la comisaría primera, comisario Marcelo Silva, quien explicó que a las pocas horas el rodado fue hallado en inmediaciones al ingreso a la base Almirante Zar, sin sus cuatro ruedas y sin la batería.