Claudia Loyola confirmó en diálogo con Radio Chubut que los incidentes ocurrieron anoche, frente a su vivienda particular, y fueron protagonizados por un grupo de exaltados que concurrieron para presionar para que un terreno destinado a una planta pesquera valga menos y pueda ser pagado en cuotas.

La insólita manifestación fue instigada por los dueños de la empresa «Bahía Camarones Pesquera SRL», quienes pretendían que la ordenanza aprobada por los Concejales cediendo en venta directa un predio de 3.700 m2 propiedad del municipio, tenga una rebaja en el precio y encima se les permita pagar en cuotas.

Loyola describió que debió enfrentarse con la patota que tenía un claro sentido intimidatorio con varios de ellos alcoholizados, que incluso apedrearon los vehículos estacionados.

La jefa comunal se vio obligada a pedirle a allegados que rescaten a sus hijos de la vivienda ante el inminente peligro.

Por esa razón radicó tres denuncias: Una penal por amenazas e intimidaciones, otra ante la comisaría de la mujer por constituir un claro ejemplo de violencia de género y una tercera ante la oficina de protección de derechos de la minoridad porque debió evacuar a sus hijos.

La intendenta aclaró sin embargo que las actitudes violentas vienen desde hace un buen tiempo aunque la hostilidad fue escalando, lo que incluyó además mensajes intimidatorios hacia los concejales, de manera virtual y directa.

Radio Chubut también dialogó con Matías Sebastián Draiye, uno de los socios junto con Gustavo Edmundo Carreño y Adrián García Lago.

Draiye consideró que el terreno que se le iba a ceder era caro y por eso el reclamo.

Justificó el enojo en la gran cantidad de gastos que tienen para producir en Camarones, sin energía y con problemas de logística.

Y negó que la de anoche haya sido una manifestación violenta porque con dos policías se mantuvo la calma.