El hallazgo del acoplado fue confirmado en diálogo con Radio Chubut por el jefe de la comisaría de Camarones, Damián Lacanette, quien explicó que el térmico vacío fue encontrado a unos 150 kilómetros al norte de esa localidad por la traza de la ruta provincial 1.
Lacanette reconoció que toda la investigación orienta a un auto robo que el chofer fingió en complicidad con quienes terminaron llevando el acoplado a la planta en Camarones.
En apariencia el acoplado cargado con langostinos que salió de Caleta Olivia con destino a Mar del Plata cambió de destino a la altura de Puerto Madryn y, en vez de seguir para el norte, retomó el camino hacia el sur y entró a Camarones donde se descargó la mercadería y luego se deshicieron del térmico.
Pero no fue producto de un robo, sino que el camionero entregó la carga y simuló haber sido amenazado de muerte.
Las contradicciones sobre cómo se hizo el robo despertaron las sospechas de los policías lo que fue ratificado por el seguimiento telefónico que marcó el destino final.
A todo esto hay que agregar que la planta de Camarones que estaba paralizada, de buenas a primeras comenzó a convocar personal cuando no había descargado ningún barco.