La policía del Chubut requirió mediante oficio a las demás fuerzas policiales del país la captura de Leonardo David Bustamante de 24 años y Renzo Fernando Muñoz de 25.
Ambos están señalados como los principales sospechosos del homicidio del estudiante de medicina Alexis Cueva, de 23 años, cuyo cuerpo fue hallado con heridas de degollamiento en el cauce seco del arroyo «La mata» al sur de Comodoro Rivadavia.

Cueva había sido reportado por sus familiares como desaparecido el sábado 23 de noviembre y su cuerpo fue encontrado el jueves de la semana pasada en el fondo del cañadón visiblemente deshidratado.

Se estima sin embargo que el lugar del hallazgo es una «escena secundaria» porque al joven lo mataron en otro lugar y luego arrojaron allí el cuerpo, desde una altura no inferior a los 15 metros.

El pedido de captura para Bustamente y Muñoz fue dispuesto por la jueza de Comodoro Rivadavia Raquel Tasselo a instancias de la fiscal Camila Banfi, según confirmó esta última en diálogo con Radio Chubut, argumentando que «sus testimonios fueron contradictorios y cuando volvimos a sus domicilios habían desaparecido».

Hubiera sido prácticamente imposible encontrar al cuerpo de Cueva si no fuera por el informe que brindó la compañía telefónica que registró una llamada desde el celular de la víctima al sur de Comodoro Rivadavia por una torre de señal que está entre esa ciudad y Rada Tilly.

«Ahí no solo se registró la señal del teléfono de la víctima sino que también existen otros dos teléfonos que se activaron muy probablemente de los buscados, quienes formaban parte del mismo círculo de amistades y entraron en contradicciones cuando se los requirió» explicó Banfi.

Tras encontrar el cuerpo luego de un rastrillaje que incluyó efectivos que se desplegaron por la zona de campos en camionetas todo terreno, caminando y montados a caballo; la policía cumplió con el primer trámite de la investigación que era detectar a quienes estuvieron con la víctima hasta último momento y fueron de inmediato a buscar a Bustamante y Muñoz.

«Ellos dieron datos contradictorios porque primero dijeron que lo habían llevado a un lugar determinado y ahí nadie lo vio a Alexis, pero no solo eso, en ninguna cámara de vigilancia se lo registra ni tampoco al vehículo que supuestamente los llevó» explicó Banfi.

Sin embargo cuando volvieron a buscarlos para pedir más datos ya no estaban, habían desaparecido de sus domicilios, con lo cual «se orientó la investigación porque hasta ese momento no estaban ni siquiera imputados».

Banfi no descarta ninguna hipótesis, ni siquiera la de un ataque homofóbico o la utilización del consumo de estupefacientes como ha ocurrido ya en muchos casos en los que «se juntan, consumen y después se desconocen».

Sin embargo otros móviles del crimen parecen más lejanos, como el robo o un «ajuste de cuentas».

La fiscal admitió que aguardan los resultados complementarios de la autopsia que podría dar certezas sobre la investigación en curso.