El dato fue confirmado por el intendente de Gaiman, Darío James, en diálogo con Radio Chubut.
El jefe comunal reconoció que estaban esperando la llegada de una manga de turbiedad provocada por la lluvia, superior a las 2.000 partículas que estaba pasando por Dolavon y en unas 10 horas llegarían a su localidad.
James consideró como muy probable que, si esa pluma de agua turbia arrastrada por el río pasa con ese nivel de carga, habrá que interrumpir el proceso de potabilización.
El jefe comunal puso en duda la capacidad de transporte que tiene el cauce a propósito de la falta de limpieza y el taponamiento del lecho por árboles caídos, proceso de embancanamiento y basura acumulada.