El hecho fue advertido esta mañana cuando una de las empleadas de la oficina ubicada en calle Belgrano casi Costa Rica, corroboró que una de las puertas laterales del edificio estaba abierta, aunque no forzada.
Al recorrer el lugar se pudo establecer que el único sitio donde había daños era en la puerta de la oficina de Héctor Catillo desde donde fueron sustraídos un equipo de DVR y dos computadoras, una de ellas notebook y la otra de escritorio.

Según lo que aportaron los trabajadores del lugar, ayer antes de irse todas las puertas quedaron bajo llave.
Anoche, el sereno que debe hacer la custodia faltó al trabajo lo que habría posibilitado el ingreso de desconocidos.

El único lugar donde se observaron faltantes fue en la oficina de Castillo, indicó el sub comisario Diego Correa, segundo jefe de la seccional segunda que actuó por cuestiones de jurisdicción.

Dijo además que se trabaja para dar con las imágenes de las cámaras de seguridad de las inmediaciones a fin de poder establecer detalles de lo ocurrido.