El ex ministro de Economía y especialista en energías renovables, Ismael Retuerto, habló del gran potencial que tiene la provincia.
El Socio Director de la compañía eólica ENAT y presidente de NRG Patagonia, analizó la actualidad de la industria del hidrógeno verde y las últimas inversiones que se han realizado en la región patagónica, que por el momento le fueron esquivas a Chubut.
Retuerto puso hincapié en el enorme potencial desde las energías renovables que tiene la provincia y marcó que deben existir políticas planificadas tanto públicas como privadas en conjunto con las universidades para avanzar en la materia.
De esta forma, describió que “Chubut es la primera provincia del país en potencia instalada eólica con 1.200 megavatios, que equivalen a dos Hidroeléctricas Futaleufú, a 20 Hidroléctricas Ameghino y cinco veces la central de Rio Turbio a carbón”.
Marcó que “ello requiere de líneas e infraestructura, para dar las posibilidades para el desarrollo de hidrógeno, que aparece como una opción de relevancia en el mundo”.
Asimismo, el ex titular de Economía de la provincia opinó que “estamos en condiciones si se juntan varios factores para que Chubut entre en esa carrera para desarrollar la industria”.
Mencionó que “el hidrógeno va a venir de la mano de los grandes avances y Argentina puede jugar un gran papel y Chubut no es menos que Rio Negro, que Tierra del Fuego en esta materia”.
Ismael Retuerto hizo un mea culpa y afirmó que “nos tenemos que hacer cargo como empresarios y dirigencia que no hay una hoja de ruta, algo planificado”, en relación al hidrógeno.
Al mismo tiempo, reveló que “hay que darse cuenta que así como el petróleo perderá vigencia en unos años, Chubut se tiene que preparar porque ha tenido un gran desarrollo petrolero, pero se deben buscar otras alternativas”, en el marco del cambio climático.
Por último, se refirió a la polémica donde los ruralistas denunciaron que se están comprando campos productivos para instalar molinos eólicos que funcionarán para la planta de hidrógeno en Sierra Grande. Dijo al respecto que “no es cierto que no se puede compatibilizar un proyecto hidrógeno con el agro. No es necesario que entreguen el campo, no se tiene por qué dejar de lado la actividad agropecuaria”.