El vicegobernador Ricardo Sastre negó las intenciones desestabilizadoras que se le adjudican respecto a la gestión del gobierno provincial.
Puso énfasis que su intención no es serrucharle el piso a Mariano Arcioni y de manera irónica aclaró: «no soy carpintero».Reconoció que, como cualquiera, siempre quiere «ir a más» pero eso será en otro momento y no ahora, porque fue elegido para vicegobernador y ese rol será desempeñado durante todo el mandato que transcurre.
Repasó que él formó parte de una coalición de gobierno para la que fue convocado y en un lugar que él no pidió, por lo que mal se le pueden adjudicar dobles intenciones políticas.

Sin embargo admitió que le molestó la calificación de «miserables» que disparó el gobernador Mariano Arcioni de la que no tiene ninguna duda fue dirigida para él y su sector.
Evitó más confrontación argumentando que existe con el gobernador, más allá de diferencias, una amistad a pesar de los «interlocutores» que no son de lo mejor pero «todo se puede evitar con una charla de café».

El gobierno niega que esté espiando al vicegobernador pero Sastre dice que «son todos policías» los que están en la movida
El vicegobernador del Chubut, Ricardo Sastre, pidió que se investigue a fondo lo que ocurre con los policías que aparecen involucrados en amenazas, mensajes intimidatorios y supuesto espionaje ilegal.
Es por la denuncia que se radicó tras recibir mensajes telefónicos en algún caso y por interpósitas personas en el otro donde lo previenen sobre posibles causas que le están inventando para mancharlo.

El gobierno lo desmintió pero Sastre recuerda que quienes se contactaron con él son policías, el que estaba frente a su casa de la división drogas peligrosas también lo era y como si fuera poco, los que investigaban al propio gobernador Arcioni en el 2018 también son personal de la fuerza.
Pidió que se investigue a fondo lo que pasó porque no se puede estar en una provincia en la que hay sospechas de seguimiento ilegal por parte de la propia fuerza.

No está garantizada la sesión inaugural en la cámara de diputados
Lo reconoció el vicegobernador y presidente de la legislatura, Ricardo Sastre.
De acuerdo a la constitución provincial, el período ordinario de sesiones comienza en el primer día hábil de marzo, o sea en 10 días.
El encargado de la apertura de la sesión inaugural es el propio gobernador que brinda su discurso delineando lo que hizo y lo que hará.
Sin embargo el acto institucional no está garantizado porque el gremio está de paro y amenaza con no prestar servicios el día de la misma sesión inaugural.
«Todavía no está garantizado porque no se pagaron los sueldos» reconoció Sastre quien espera mantener una reunión con la Asociación del Personal Legislativo que es el gremio que representa a los trabajadores de la casa.
Respecto a la escasez de trabajo legislativo, Sastre como presidente de la cámara recordó que se está en período de receso.