En el marco del Presupuesto 2025, sostuvo en su presentación que para fines de este año, la cotización del dólar oficial se ubicará en $1019,90. Además, para diciembre del año que viene, se espera que llegue a los $1207.
Por su parte, la inflación interanual augura que continúe descendiendo y de manera abrupta: este 2024, el IPC del INDEC debiera dar 104,4%. Incluso, las aspiraciones son a que la de todo 2025 sea del 18,3%.
Asimismo, también prevén un crecimiento en la economía: luego de las estimaciones del Banco Mundial para este año, donde proyectan un derrumbe de entre 3 y 4 puntos, el Presupuesto espera un crecimiento del 5% del Producto Bruto Interno (PBI), mientras que para el 2025 el producto subiría 5% y otro 5,5% en 2027.
Los cuatro ejes del Presupuesto 2025
Equilibrio fiscal sostenido: busca que el Ejecutivo corrija definitivamente los desajustes y sostener las condiciones de estabilidad macroeconómica. Esto provocará un ambiente favorable para el aumento de la inversión privada, la mejora de la productividad y el crecimiento de la actividad, del empleo y los ingresos.
Acompañamiento social sin intermediaciones: el Gobierno destacó el aumento en la y la decisión de ajustar las jubilaciones en función de la inflación. De todas maneras, reconoce que se buscará recomponer y mantener el poder adquisitivo de jubilados y pensionados. Para el año 2025, se reducirá el gasto político para dar prioridad al sostenimiento de los ingresos de los sectores de mayor vulnerabilidad.
Modernización y simplificación del Estado: profundizará la simplificación y racionalización de la estructura estatal y continuará con la reducción de fondos fiduciarios. Además, avanzará en el saneamiento, concesión y/o privatización de empresas públicas.
El equipamiento y modernización de Seguridad y Defensa: fortalecimiento y revalorización de las fuerzas de la Defensa continuará siendo una prioridad en 2025, así como su capacitación.