El ministro de educación del Chubut, Andrés Meiszner, anunció que «a partir de hoy está disponible la plataforma digital que permitirá el vínculo pedagógico de los estudiantes con sus docentes».

Según el funcionario, ya adhirieron el 82% de las escuelas que representan más de 3.400 aulas de todos los niveles educativos «propiciando, además del proceso educativo, la participación de la familia, porque papá o mamá será central en este nuevo esquema».

El llamado «classroom» es activado por la dirección de la escuela que envía a todas las docentes una invitación por mail.

El sistema se completa con las llamadas «mamá (o papá) delegada» que se encarga de recibir el material y la directiva del docente y luego la transmite a los padres del mismo curso, siempre de manera virtual, compartiendo así las instrucciones.

La nueva modalidad se instrumenta sin el acuerdo del gremio docente, que a través de un comunicado lo calificó como «discriminatorio» porque «no todos cuentan con la tecnología para sumarse».

A esto, el ministro Meiszner respondió que «eso lo sabemos, y por eso iniciaremos una campaña de aprovisionamiento de notebooks retomando el modelo que implementó en su momento la gestión presidencial de Cristina Fernández de Kirchner para que cada chico tenga su computadora».

«De cualquier manera quienes no puedan acceder a la tecnología recibirán un cuadernillo para que no queden atrasados» aseguró el ministro de educación del Chubut.

De acuerdo a los llamados de los oyentes de radio Chubut a la emisora, hay al menos un 25% de familias que tendrán dificultades para acceder al «aula virtual», ya sea porque no tienen computadora, no tiene internet, o el celular por el cual también podrían ingresar no está lo suficientemente actualizado como para soportar la información que debe recibir.

El otro gran problema que tiene nuestra provincia es la falta de conectividad en el centro de la en la meseta central.

«A todos vamos a llegar, con paciencia y buena voluntad, porque el ministerio de educación debe ser activo y no una máquina de impedir» prometió Meiszner.

Esta nueva aplicación se da en el marco de la cuarentena por el coronavirus, pero en rigor no hace más que continuar con una seguidilla de días sin clases que no tiene que ver con la pandemia sino con el paro docente, a punto tal que el ciclo lectivo que debió comenzar el 26 de febrero no arrancó en la mayoría de las escuelas.

De paso el ministro advirtió que la continuidad de la cuarentena tiene un escenario de al menos 90 días, por lo que no descartó que no haya clases en las aulas físicas hasta pasado julio.