Así lo explicó en diálogo con este servicio informativo, Graciela Juárez, vecina del barrio, quien expuso que en un mes y medio han sufrido alrededor de 20 robos en el sector.
Agregó que lo que quieren es trabajar en conjunto con el ministerio de seguridad para realizar un trabajo de prevención para evitar que el barrio se convierta en una zona caliente de hechos delictivos.
Juárez dijo que los problemas también tienen que ver con la poca iluminación de las calles lo cual dificulta el poder esperar tranquilos en las paradas de colectivos.
Finalizó explicando que otra problemática que preocupa a los vecinos son los asentamientos que rodean al barrio lo cual genera incertidumbre en los vecinos, algunos incluso no duermen por miedo a sufrir un robo.