Según informó Cristian Otero, jefe del cuerpo activo de bomberos voluntarios, la construcción, realizada con materiales de alta combustión como la madera, facilitó la rápida propagación del fuego. «No fue una tragedia por milagro», señaló Otero, destacando la suerte de que no hubiera consecuencias graves.

Tres dotaciones de bomberos voluntarios trabajaron intensamente durante dos horas para controlar y extinguir el siniestro. Como medida preventiva, los integrantes de la familia fueron trasladados al hospital local. Afortunadamente, se reportó que no sufrieron heridas de consideración.

