
La historia comenzó con una enfermedad que la obligó a dejar la actividad como playera de estación de servicio que venía realizando.
Al momento de hacer el trámite jubilatorio por invalidez, le aparece un aporte del ministerio de educación del Chubut que ella jamás percibió porque no tiene nada que ver con la actividad educativa y ni siquiera conoce esta provincia.
Ella acreditó los aportes hechos durante toda su vida laboral como empleada de Alpargatas primero y luego en las estaciones de servicio.
El planteo es que nadie la atiende en el ministerio de educación para poder subsanar el error con el cual le están provocando un fastidio absolutamente ajeno a su vida.
