Se conformó recientemente y ya realiza acciones para concientizar sobre la importancia de prevenir accidentes y acompañar a las víctimas. Trabajan en conjunto con organizaciones nacionales como Madre del Dolor y Estrellas Amarillas.
El intendente de Trelew, Adrián Maderna, recibió este jueves a integrantes de la Mesa Chubutense de Familiares de Víctimas de Siniestros Viales, conformada recientemente con la participación de personas de distintas localidades de la Provincia.
La entidad trabaja de manera articulada con ONGs nacionales como Madres del Dolor, Estrellas Amarillas; y en contacto con entes estatales como El Observatorio de Víctimas del Delito del Congreso Nacional, la Agencia Nacional de Seguridad Vial y la Agencia Provincial de Seguridad Vial, además de unas 30 organizaciones de familiares en todo el país.
Luego del encuentro con el intendente, Federico Labaen, uno de los referentes de la organización, indicó que “la Mesa se conformó oficialmente el 10 de junio pasado, en coincidencia con el Día Mundial y Nacional de la Seguridad Vial”, aunque se viene trabajando desde el año 2020. “Los integrantes somos familiares de víctimas de distintas localidades de la Provincia, que trabajamos con la colaboración de profesionales de la justicia y la salud”, precisó.
Labaen contó que las dos principales acciones llevadas adelante por la organización son “Calles por la Vida”, una iniciativa promovida por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), a través de la Organización Mundial de la Salud (OMS); y la distribución de la Guía de Asistencia a las Víctimas, declarada de interés por el Congreso de la Nación, y que fue elaborada por la organización Madres del Dolor.
“Por delante tenemos el objetivo de presentar un proyecto de ley en la Legislatura Provincial y continuar reuniéndonos con todos los concejos deliberantes y con cada uno de los intendentes, para que estas acciones se declaren de interés en la provincia y en cada localidad. Aún nos falta mantener reuniones en Comodoro Rivadavia, Rada Tilly y Esquel”, precisó.
Calles por la vida
Según datos del Observatorio Vial de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, a nivel nacional, los peatones son quienes más sufren el efecto que la velocidad de los automotores produce sobre los seres humanos en ocasión de un siniestro vial.
La iniciativa “Calles por la Vida” busca establecer el límite de velocidad para calles de zonas urbanas a 30 kilómetros por hora, permitiendo reducir sustancialmente la distancia de frenado de los vehículos ante una situación de emergencia, lo que incide en la caída de la siniestralidad, como ha sucedido en los países que han adoptado esta medida. Se estima que en caso de producirse el hecho, una persona atropellada a 30 km/h tiene un riesgo de morir de apenas el 10%. Dicho de otro modo, de cada 10 peatones atropellados a 30 km/h, 9 sobrevivirán. Por el contrario, a medida que aumenta la velocidad, las chances de sobrevida de un peatón se reducen exponencialmente.
