Uno de los últimos damnificados fue el vecino de la zona, Carlos Saenz, quien informó en diálogo con Radio Chubut que en uno de los cuadros de la estancia «La Isabel» descubrieron los cadáveres de tres ovejas que estaban a punto de parir despanzurradas, y la pérdida de otras 20 que estima corrieron igual suerte.

Saenz describió que esta situación se repite desde hace años y se mostró extrañado porque frente a estas poderosas fundaciones que avanzan a fuerza de un discurso ecologista con fuerte financiamiento internacional, no hay quien se anteponga.

En el mismo sentido opinó la presidenta de la Rural de Camarones, Cristina De Luca, quien recordó que intentaron llevarle el problema al gobernador sin éxito hasta el momento.

Además le hicieron llegar a la propia fundación un listado de obras a realizar para que blinden los campos con alambrados olímpicos reforzados, porque de lo contrario las especies predadoras pasan de un predio a otro sin ninguna dificultad y los perjudicados son los productores.