Lo normal es que no superen las 40 unidades, de allí que las plantas potabilizadoras ubicadas en el valle inferior del río Chubut debieron detener su producción a la espera que baje el nivel de sedimentos.
El dato fue confirmado, a primera hora de hoy, por el intendente de Gaiman, Darío James.
En esa localidad es la municipalidad la que presta el servicio de potabilización.
El dato positivo es que la mancha de turbiedad, la segunda desde que la lluvia aportó sedimentos al lecho, pasaba con rapidez y ya se notaba un marcado descenso a la altura de Dolavon.
James aprovechó para pedir a los usuarios que restrinjan al máximo el consumo de agua porque las reservas, a esta altura, estaban comprometidas.