Así lo confirmó en diálogo con Radio Chubut el responsable de esa planta, Carlos Lucero.
El especialista recordó que el nivel de turbiedad subió en pocas horas de 400 a 600 unidades de turbiedad, lo que obligó al cese de la producción porque es más lo que se gasta en insumos que en el rendimiento que se le puede sacar a la toma desde el río.
Lucero no se mostró preocupado por la situación ya que tienen las reservas completas y eso asegura que por las próximas horas el abastecimiento será normal.