
El funcionario, quien está iniciando la gestión tras la decisión judicial de la intervención, explicó que está abocado a realizar un diagnóstico preciso de la situación de la entidad para cumplir con uno de los mandatos que es mantener informado al juez federal.
Al describir los primeros días de intervención, aprovechó Bourdieu para agradecer al personal que lo recibió con la mejor predisposición e incluso ventiló, como anécdota, el comentario que escuchó de uno de los empleados de planta que dijo algo así como «llegó la hora de hacer un mea culpa», en referencia a que si se llegó a la intervención por algo será.
Su gestión será ejecutada con un plantel de tres integrantes que lo asistirán en la cuestión contable, la jurídico-legal y la técnica que se encargará de las redes de distribución de los distintos servicios.
