Un integrante de este grupo es el joven trelewense Tomás Berón, estudiante de quinto año de la carrera de Ingeniería Electromecánica de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP).

Berón contó que el objetivo principal es “poder suministrarle a los médicos a través de esta mascara, aire previamente filtrado, libre de cualquier tipo de patógeno, protegiendo nariz, boca y ojos; para evitar que se contagien de COVID-19”.

El joven inventor de nuestra ciudad dijo que este tipo de equipos ya existen, pero lo que ellos están creando sería fabricado con materiales que pueden ser comprados totalmente en nuestro país, lo que implica que se realice “a un costo relativamente bajo en comparación con los barbijos N95, aparte de que son más eficientes y duraderos”.

Repasó que está trabajando con un grupo de compañeros de su facultad y con ingenieros ya recibidos, que en conjunto con profesionales de la salud, trabajan en el prototipo para realizarlo de la mejor manera teniendo en cuenta cuestiones médicas.

Explicó que solo resta conseguir algunos materiales que están en Capital Federal y, debido a la restricción en la circulación entre ciudades, no logran que llegue desde la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a La Plata.

“Cuando nos lleguen esos materiales podremos desarrollar el prototipo y así probarlo si realmente funciona, para luego sí comenzar a producirlo”, agregó Tomás Berón.