El joven, en diálogo con Radio Chubut, explicó que el accidente se produjo el 16 de junio, tras lo cual quedó internado por las graves lesiones que recibió.
Una vez repuesto de la fractura y sobreponiéndose a los dolores, Agustín comenzó el trámite para cerrar el tema legal ante la fiscalía y luego, cuando se aprestaba a recuperar la motocicleta que había quedado en el corralón policial, lo llaman para avisarle que habían robado su rodado.
Agustín Palas, visiblemente indignado por lo que ocurrió, sospecha que en el robo tiene que haber complicidad de algunos uniformados porque no se explica cómo se puede robar alguien una moto del propio predio de la policía.
Se lamentó porque a la motocicleta la había comprado hacía relativamente poco tiempo con un enorme esfuerzo para dedicarse al reparto de comida que emprendió con su joven esposa.