«Se comunicó conmigo la nueva secretaria de hacienda de la municipalidad de Rawson para que mantengamos reuniones» describió Escalante.

La llamada cobra especial importancia toda vez que los guardavidas de Playa Unión, que no están sindicalizados, se niegan a iniciar la temporada que debería comenzar hoy si no le pagan de acuerdo al convenio colectivo de trabajo.

Como respuesta, en la municipalidad les dicen que si piden lo del convenio tienen que aceptar todo, es decir deberes y obligaciones, entre ellos el aceptar que quede abierta la posibilidad que lleguen guardavidas de cualquier otra playa siempre que tengan la habilitación y que el cuerpo de Playa Unión deje de ser un círculo cerrado.

Escalante, tras confirmar la reunión, aclaró que «no somos carneros» por lo que, más allá de las diferencias que puedan tener con sus colegas de Rawson, no avanzará «en reuniones cerradas» y de espaldas a los locales.

Consideró que en realidad esa reunión no se concretará nunca porque no es más que una chicana.

Pero si así fuera, será siempre con los guardavidas locales presentes.

Advirtió sobre la gravedad de los dichos de la secretaría de gobierno de la municipalidad de Rawson, Karina Barneche, quien se mostró confiada en que la temporada podía posponerse por una semana porque el pronóstico no era bueno y eso desalentaría a que la gente concurra a la playa.