El funcionario aclaró que de ahora en más se hace cargo de la negociación el ministro de economía, Andrés Meizner, lo que fue consensuado para quitarle a la contraparte la excusa de que por culpa de él no se retoma el diálogo, personalizando así una discusión institucional.

Sin embargo aclaró que el contrato está rescindido por incumplimiento de varios ítems que van desde el cánon que deben pagarle al Estado hasta la incorporación del personal y el sostenimiento de los cupos.

«Pero todo es negociable» sostuvo Arbeletche, quien cree que si se acuerdan los puntos de discrepancia podría retomarse la vinculación ya sea con la realización de un nuevo contrato o una adenda al que se firmó oportunamente.

En otro tramo de la entrevista, Arbeletche aclaró que la empresa local no es filial de la empresa norteamericana con sede en California sino del empresario local Yu Shon Mou.