Martín Luna, en diálogo con Radio Chubut, interpretó que muchos que se quejan no leyeron la ordenanza y se dejaron llevar por el término «regulación» que se traduce como un cercenamiento al trabajo, cuando lo que se intenta es hacer exactamente lo contrario.

El concejal oficialista recordó que existe una ordenanza para el sector que data del 2017 y fue incluso reformada en el 2019, estableciendo requisitos que no se cumplen porque nadie controla y así no se podía seguir.

Para Luna la ordenanza aprobada mejora ostensiblemente las condiciones para el reparto bajo esta metodología y quienes así no lo consideran es porque no conocen el texto de la norma aprobada.

Luna no se mostró preocupado en caso de que la ordenanza sea vetada por el ejecutivo municipal por considerar que así son las reglas del juego y está dispuesto a discutir sobre los puntos que seguramente puede mejorarse.