Un vecino del sector llamó a la policía avisando que un hombre estaba trepado a un poste de luz robando cables.

Cuando el sujeto vio el arribo de los uniformados pegó un salto y se dio a la fuga a pie, despojándose de una pinza y un cuchillo.

La policía lo detuvo a los pocos metros.

Al entrevistarse con el vecino, este comentó que en la tarde el mismo sujeto había estado cortando y enrollando cables y que habían dejado otros escondidos en un árbol.

En la madrugada pudo percatarse de la acción de robo, ya que sus perros comenzaron a ladrar al observarlo trepado al poste.

El vecino se quejó porque actualmente ya se encontraba sin el servicio de internet producto de los robos de cables que se han dado en días anteriores.