Lo adelantó en diálogo con Radio Chubut el diputado nacional y presidente de ese partido, Ignacio Torres.
Ocurre que la sede partidaria que está a pocos metros de la seccional primera fue vandalizada por un grupo que pasó, rompió vidrios, intimidó a los militantes de ese partido y se retiró de la escena.

La causa quedó en la nada porque el fiscal no dispuso de medidas para avanzar en el esclarecimiento del hecho.

Sin embargo hoy, Torres reconoció que la culpa no es del fiscal sino de un subcomisario que minimizó lo ocurrido, no aportó datos y llegó 40 minutos después a la escena a pesar de estar a pocos metros bajo el argumento que «hay que bajar la espuma».

El uniformado sería denunciado por incumplimiento de los deberes de funcionario público.

Para Torres no hay ninguna duda que son los mismos que dañaron la glorieta de la plaza céntrica y la iluminación del monumento al dinosaurio ubicado en el acceso norte a Trelew.

Entre los que se manifestaron frente a la sede del PRO había quienes reivindicaban los derechos de pueblos originarios.

El diputado nacional fue al respecto contundente: «No son Mapuches, son chantas».