Cortes de ruta en esta zona, ocupación de municipios en la comarca andina y la permanencia de un contingente de dirigentes sindicales que pasaron la noche en Casa de Gobierno es el panorama con el que despertó la provincia.
En el caso de los dirigentes gremiales que permanecieron en la sede del gobierno provincial en Rawson, se trata de un contingente de ATE que no abandonó el edificio histórico durante toda la noche y la madrugada exigiendo ser atendido por los funcionarios para que den una respuesta -entre otros planteos- al atraso salarial.

Como no fueron atendidos por las autoridades, los dirigentes se quedaron allí mientras una guardia de militantes del gremio, en el exterior, acompañaron la medida.

Ana María Bustamante, de la conducción de ATE seccional Puerto Madryn, explicó en diálogo con radio Chubut las razones de su presencia.

Se quejó porque no le dejaron ingresar ni comida ni agua y les bajaron la potencia de los calefactores, lo cual hizo difícil la permanencia de los aguerridos gremialistas en el interior de Casa de Gobierno.

También habló Nelly, otra militante de ATE que permaneció toda la madrugada en la llamada «Puerta 2» quien desmintió de manera terminante que se haya producido un altercado entre los propios militantes de ese gremio, como se informó.

Si bien existió una trifulca, esta obedeció a «cuestiones más personales que otra cosa» explicó.

Pero no es la protesta de los dirigentes estatales el más conflictivo.

En el acceso a Trelew por ruta 3, una extensa caravana de camiones, automóviles y camionetas se extendió por kilómetros hacia ambos lados del piquete que realizan los antimineros, enojados porque la legislatura del Chubut rechazó el proyecto de iniciativa popular que pretendía prohibir la actividad minera.

El vice gobernador del Chubut, Ricardo Sastre, defendió el mecanismo que se empleó que siguió todos los pasos legislativos tras permanecer 6 meses en la comisión interna de la cámara de diputados.

Recordó que ese mecanismo de participación ciudadana tiene un plazo perentorio para ser tratado y si no lo hacían a los responsables de la comisión le cabía la posibilidad de ser destinatario de acciones judiciales.

Sin embargo cuestionó a los que decían aprobar el proyecto de iniciativa popular pero no fueron capaces, en medio año, de generar un despacho por la minoría para discutirlo en el recinto.

En un claro mensaje hacia quienes cortan la ruta, se preguntó qué culpa tienen las personas que son usuarias de la ruta de sufrir las consecuencias de un conflicto sobre el cual no tienen nada que ver y recordó que no se trató ayer la habilitación de la minería sino el proyecto que pretendía prohibirla.

Al respecto valoró que haya tenido el resultado de rechazar esa iniciativa de prohibición porque de lo contrario se pondría en juego la continuidad de fuentes de trabajo de aquellas industrias cuya actividad se pone en riesgo y consecuentemente se puede agravar la crisis laboral.

De paso le pidió a los diputados que se dicen ser leales a la voluntad popular que «hagan más política y menos demagogia».

Las principales víctimas de la protesta sobre la ruta fueron los camioneros que durante horas se vieron demorados sobre la calzada.

Este es el caso de Nicolás Díaz, dedicado al transporte de carne, quien debió desviarse de su trayecto para tomar la ruta 1 de ripio entre Rawson y Puerto Madryn para cumplir con su trabajo.

«Yo me levanto a las 2 de la madrugada para cargar el camión y salir a repartir y me pregunto a qué hora trabajan o de qué trabajan los que están en la ruta sin hacer nada» dijo el transportista en tono de descargo tras recordar que él partió desde Dolavon.

Peor la pasó Pablo Bonacalza quien sufrió el corte de ruta en Trelew pero ya venía de soportar un piquete en la frontera con Chile y otro en Caleta Olivia.

En el caso de nuestra ciudad, el camionero que viaja acompañado por su hijo se quedó varado ayer a unos 2 km. de la cabecera del corte, en cercanías del acceso al centro de deposición de basura.

Describió que a un colega suyo, que estaba estacionado exactamente delante de su camión, lo tomaron por la fuerza y le robaron todo lo que poseía.

«Eran dos los que lo apretaron y le sacaron hasta el celular» detalló Pablo Bonacalza que calculó que como a él no lo vieron solo, no lo atacaron.

Por esa razón optó por pegar la vuelta y detenerse en la estación de servicio que está en el acceso sur a Trelew en cercanías del autódromo.