El funcionario aclaró que la intención nunca fue erradicar a los carros de comida de la zona próxima a la laguna Chiquichano, sino regularizar la situación, brindarle herramientas para que hagan su trabajo y luego reubicarlos en otro sector próximo, sobre el otro lado de la terminal.

Suquia aclaró que esa fue la intención desde un principio, para lo cual se trabajó en el encuadramiento legal de los food trucks, la realización de cursos de manipulación de alimentos y todo lo atinente a una habilitación comercial como se le pide a los restantes.

En otro orden, el funcionario se refirió al impactante incremento de recaudación que se logró en el puesto de abasto ubicado en el acceso norte a Trelew, lo que no solo fue por una ampliación del horario de atención sino por la regularización del sistema de pago.